TRATAMIENTOS

“ESTE ARTE REQUIERE AL HOMBRE COMPLETO”

“Yo sólo/a no puedo con esto.” Esta es una frase que se repite a menudo en una primera sesión con un paciente.

Cuando alguien decide concertar una cita con un psicólogo, ha intentando antes, acabar con su malestar de distintas maneras. Pero las mismas actitudes, decisiones, emociones, conductas,… que nos han llevado al malestar No van a sacarnos de él. Se necesita una nueva mirada, hacer algo distinto. Esta diferencia la aporta el psicólogo.

Te ofrezco un espacio donde poder revisar lo que te ocurre, atendiendo aquellas dificultades que cotidianamente te preocupan sin descuidar aspectos que emergen de tu insconsciente y has de tener en cuenta. Prestando atención a aspectos que tu aún no puedes ver de ti mismo pero que yo puedo “reflejar” para ti. Sin juzgar y trabajando con diverso material simbólico. Sueños, dibujos, relatos, escritos,… Guiándote para que puedas “desenredar” aquellos aspectos de tu vida que están atascados.

TRABAJO CON LOS SUEÑOS

“Los sueños nos muestran cómo encontrar un sentido en nuestra vida, cómo cumplir nuestro destino y realizar el gran potencial de vida que tenemos dentro”.

El trabajo con sueños es importante porque nos proporciona una mirada diferente sobre aquellos asuntos que nos envuelven. El sueño siempre es único y viene en el momento adecuado. Es un mensaje de los poderes del instinto, del inconsciente colectivo, un mensaje que llega en un momento preciso durante cierta noche, dirigido específicamente al soñante.

Proporcionan un contacto con la profundidad de la mente revelando una intensa relación entre los estados internos y externos del ser.

Contienen importante información sobre la salud física y psíquica, indican nuestro potencial latente, presentan soluciones creativas para los problemas cotidianos e ideas inspiradoras para nuestra vida.

ADULTOS

A medida que crecemos vamos desechando rasgos y aspectos de nuestra vida por múltiples razones.

Pronto desaparecen de nuestra vista pero llevamos su peso con nosotros. Se “cuelan en nuestro día a día” generando problemas y síntomas neuróticos. Constituyen nuestra sombra.

Ansiedad, depresión, baja autoestima, desórdenes del sueño y de alimentación, duelos no resueltos, crisis, problemas de relación, estrés, burnout, falta de sentido, son algunos de los problemas que nos llevan a iniciar una psicoterapia.

El espacio psicoterapeútico es un buen ámbito para poder prestar atención a todo aquello que nos hemos ido dejando por el camino para ver cómo poder integrarlo en nuestra vida. A medida que vamos ampliando nuestra consciencia muchos síntomas dejan de tener razón de ser.

PAREJAS

Las relaciones que establecemos con los demás “nos tocan nuestras heridas” y nosotros también tocamos las de nuestros compañeros. En algún momento nos hacen sufrir. Pero también son una magnifica oportunidad para conocernos mejor a nosotros mismos. Esto es cierto para cualquier tipo de relación pero donde ocurre más intensamente es en la Relación de pareja.

No llegamos a la pareja con las manos vacías. Todos llevamos con nosotros la historia que hasta entonces hemos vivido, diferentes modos de relacionarse, roles que hemos jugado en nuestra familia, expectativas conscientes e inconscientes sobre cómo ha de ser,…. Y a menudo se generan conflictos.

La presencia del psicólogo introduce un elemento nuevo en la pareja que vehicula, ayuda a entender y trabajar en el conflicto.

Algunos de los problemas que trato: dificultades de comunicación, falta de deseo, infidelidad, celos, dificultades sexuales, cambios en los ciclos vitales,…

ADOLESCENTES

La Adolescencia es una etapa de metamorfosis.

El adolescente ha de pasar del mundo de la infancia al mundo de los adultos. Y está en transición. Ni en un mundo ni en el otro. Las épocas de transición entre dos estados, son muy difíciles porque las viejas estructuras ya no nos sirven pero todavía no hemos creado otras nuevas que nos sostengan. Pero también constituyen una oportunidad.

Ellos han de construir su identidad más allá del mundo de sus padres y empezar a abrirse camino en el mundo. Y han de hacerlo a su propia manera. Es una época de cambios, conflicto, desequilibrio emocional, aprender a manejarse con los propios instintos, riego, de buscar al grupo para alejarse eventualmente de la familia,..

Se generan tensiones y conflictos y en ocasiones el/la adolescente no puede manejarse sólo. Necesita de la ayuda de otro. En muchas ocasiones, los padres no pueden ayudarlos.

La psicoterapia les ofrece un espacio donde clarificar sus emociones, conductas, pensamientos. Donde expresarse sin ser juzgados. En relación con una persona que es adulta y no proviene del mundo familiar.

Algunos de los problemas que trato: baja autoestima, estrés, desorientación, transtornos de ansiedad y crisis de pánico, transtornos de alimentación y sueño, problemas de adaptación y relación,…